Contar con un vehículo resulta de mucha utilidad a la hora de poder moverse de un sitio a otro. El mayor inconveniente es el gasto que supone en gasolina, siendo necesario llenar el tanque con determinada frecuencia para continuar usando el vehículo.

Sin embargo, existen varios trucos que los conductores pueden usar para mejorar el ahorro de gasolina, aprovechando al máximo cada litro, y logrando reducir el gasto mensual que supone llenar el tanque.

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Mejores formas de ahorrar gasolina a través de varios trucos

El consumo de gasolina es una de las principales preocupaciones cuando se compra un coche, ya que influye directamente en el bolsillo de las personas.

Para que esto no sea un problema muy grave, se cuenta con varios trucos que mejoran el ahorro de la gasolina, con el objetivo de reducir su consumo diario, y lo que se debe pagar todos los meses para tener el tanque lleno.

La aplicación de estos trucos permite ahorrar gasolina, incluso por debajo de lo indicado por las propias marcas, lo cual supone una gran ventaja para el bolsillo de los conductores.

1.      Planificar bien el viaje

La organización de un viaje es fundamental para ahorrar en gasolina, de esta manera se llega al destino de manera rápida, sencilla, y segura. Muchas veces dar vueltas o meterse por una ruta más larga, provoca que se consuma una gran cantidad de gasolina.

Alargar un viaje puede aumentar el consumo de gasolina requerido para llegar a un destino en específico. Buscando las rutas más cortas y fáciles, permite a los conductores llegar en el menor tiempo posible a su destino.

2.      Limpiar el maletero

Siguiendo con el punto anterior, es recomendado quitar del coche todo aquello que no se utilice, o sea imprescindible para el viaje. Racionalizar el volumen y el reparto de la carga, es fundamental para consumir menos gasolina.

El porcentaje que puede provocar un peso innecesario, como de 100 kilos, por ejemplo, es del 6% en un coche de tamaño medio.

Si el vehículo se usa diariamente, lo mejor es limpiar el maletero de lo que no se use, dejando las cosas en el garaje, y viajando con lo esencial. Además, es peligroso viajar con carga en el habitáculo.

3.      Arranque y puesta en marcha

No es recomendado arrancar el coche de golpe, lo ideal es hacerlo de forma lenta, permitiendo que estabilice su temperatura. En un vehículo de transmisión manual, lo mejor es conducir a partir de la segunda velocidad, y no acelerar de manera brusca.

En los motores de gasolina, la marcha se puede iniciar después del arranque. En los motores de diésel, se debe esperar un par de segundos antes de comenzar la marcha. La primera marcha solo se debe usar en un principio, ya que es necesario cambiar a la segunda después de alcanzando los 6 metros.

Después se debe conducir de forma lenta durante 20 km, esto permitirá ahorrar hasta un 11% de gasolina.

4.      Comprobar la presión de los neumáticos

Los fabricantes de coches indican en el vehículo la presión adecuada para los neumáticos, así como la presión correcta dependiendo de las condiciones climatológicas, porque cuando las temperaturas son bajas, los neumáticos requieren de más presión.

Por ejemplo, si se conduce con una presión de 0.5 bares menores a la indicada por los fabricantes, el consumo incrementará un 2% en las zonas urbanas, y un 4% en las zonas interurbanas.

De igual manera y si se viaja con mucho peso, es necesario aumentar la presión de las ruedas. Si no van inflados de la forma correcta, la resistencia es más alta, provocando que el coche consuma más.

5.      Mantener la misma velocidad

Conservar una velocidad constante al conducir, es bastante útil para ahorrar la gasolina. La conducción tiene que ser fluida, sin frenar, y sin acelerar de forma rápida, únicamente cuando sea necesario.

Para desacelerar, se debe levantar el pie con cuidado del acelerador y después accionar el freno de manera suave, para disminuir la marcha lo más tarde posible.

6.      Aire acondicionado o ventanas abiertas

El uso del aire acondicionado aumenta el funcionamiento del motor, provocando que se consuma más gasolina y gasoil, dado que activa el compresor, el elemento encargado de mantener el aire frío en el habitáculo.

Sin embargo, cuando se viaja en carretera, el aire acondicionado es la mejor opción. Cuando se abren las ventanillas del coche, la aerodinámica se ve afectada, generando una mayor resistencia, provocando que aumente el consumo de gasolina.

En cambio, si se viaja por la ciudad, lo mejor es llevar las ventanillas bajadas, siempre que sea seguro.

¿Cuándo se consume más gasolina?

Hay varios lugares y momentos donde el consumo de gasolina aumenta en gran medida, por lo que es importante tenerlos en cuenta para utilizar de forma correcta los anteriores trucos.

El consumo de gasolina en la ciudad es el mayor de todos, dado que la conducción es irregular y se acelera y frena con frecuencia, lo cual afecta la posibilidad de ahorrar gasolina, pero por otro lado, el consumo en carretera es menor, porque se mantiene una velocidad constante y se usa poco el freno.

Aunque si se aumenta la velocidad, el consumo de gasolina es más alto, dado que el motor debe luchar contra la resistencia del viento. Mientras que el consumo mixto, es aquel que se obtiene a la hora de hacer la media entre el consumo de gasolina en ciudad y carretera.